En un mundo impactado por el nuevo coronavirus, puede parecer que todo lo divertido o significativo ha sido cancelado. Desde las fiestas de cumpleaños y las vacaciones hasta las obras de teatro escolares, los deportes y posiblemente hasta las ceremonias de graduación, muchos de los momentos especiales que su niña había esperado y planeado de repente se han pospuesto o simplemente no sucederán.
Por supuesto, en el gran esquema de las circunstancias, perderse una excursión o una cita para jugar es un pequeño sufrimiento en comparación con aquellas personas cuyos seres queridos pueden enfermarse o tener un alto riesgo de contraer el virus, pero eso no significa que su niña no se sentirá decepcionada. Aquí le mostramos cómo puede ayudarla a sobrellevar y aprender a ser resistente en estos tiempos que están cambiando tan rápidamente.
Sea honesto
Intentar proteger a su niña de la realidad mientras sea posible puede parecer más fácil que decirle que algo que ella estaba esperando con mucha anticipación ha sido cancelado. Pero cuando el mundo está al revés, su niña depende de usted más que nunca para que sea alguien en quien puede confiar. Es posible que no tenga todas las respuestas (algunos eventos se han pospuesto indefinidamente y algunos se han cancelado por completo) y eso está bien, pero es importante no ocultarle información. Si a su niña más pequeña se le hace difícil entender por qué los planes tienen que cambiar, hágale saber que los adultos están trabajando muy duro para mantener a todos seguros y saludables, y que algunas actividades tendrán que esperar un tiempo hasta que los adultos puedan resolver esto y asegurarse que todos estén fuera de peligro.
Dele su espacio
Reprimir los sentimientos y actuar como si todo está bien cuando en realidad no lo está, no es bueno para la salud mental de nadie. Es importante que su niña sepa que sentirse decepcionada en este momento es totalmente normal e incluso saludable. Si necesita un día o dos para estar de mal humor o tomar tiempo sola en su habitación, hágale saber que también está decepcionado con las cosas en este momento, y comprende que ella debe estar sufriendo. Luego dele un poco de tiempo y espacio para salir de sus frustraciones. Aliéntela a conectarse de forma segura con amistades que probablemente estén pasando por decepciones similares en este momento. Un sentido de comunidad y amistad la ayudará a ver que no es la única que se siente triste o enojada y puede hacerla sentirse mucho mejor a largo plazo.
Déjele que lidere el camino para seguir adelante
Muchas cosas son inciertas en este momento, pero eso no significa que el mundo haya dejado de girar. La vida continúa, solo de manera diferente de lo que todos habíamos planeado. Siéntese con ella y haga que invente nuevos planes que funcionen dentro de sus circunstancias actuales. Si está molesta porque se cancelará un recital de baile o una obra de teatro en la escuela, ¿hay otras formas creativas en que podría compartir su actuación desde casa, tal vez usando video? Si está decepcionada por perderse el cumpleaños de un amigo u otra ocasión especial, tal vez podría crear algo con ella en casa que le pueda enviar por correo a sus seres queridos con los que no celebrará en persona. Encontrar soluciones creativas en tiempos difíciles es una habilidad que puede darle una sensación de control durante la pandemia de coronavirus y mostrarle cómo ser servicial y atenta con los demás a lo largo de su vida.
Déjele ayudar a otros
Una de las mejores maneras de superar una decepción es ayudar a otros a superar sus propios momentos difíciles. Mucha gente se siente asustada, enojada y sola en este momento y podrían beneficiarse de un poco de ánimo. Pídale que piense en maneras en que pueda traerles algo de felicidad y alegría a las personas que se sienten aisladas o asustadas. Desde escribir canciones divertidas para cantarle a sus abuelos en su próxima llamada o escribir tarjetas de agradecimiento para los profesionales de la salud que trabajan arduamente para mantenernos a todos seguros, encontrar una manera de retribuir puede darle un sentido de propósito y control, al mismo tiempo que hace del mundo un lugar mejor.